En toda narración se pueden distinguir los siguientes
elementos: el narrador o persona que cuenta la historia, los personajes, la
acción o serie de acontecimientos que se relatan, y el espacio y el tiempo en
el que estos ocurren.
ELEMENTOS
PRINCIPALES EN LA NARRACIÓN
- El narrador es quien selecciona los hechos y los presenta de un
modo determinado según el propósito que persiga. Él es, además, el que
marca el tono de la narración, ordena los hechos, caracteriza a los
personajes y guía, en suma, el transcurso de la acción.
- La acción constituye la trama narrativa, compuesta por los
hechos tal y como los presenta el narrador.
- Los personajes son los seres (generalmente personas, reales o
ficticias, pero a veces también animales u objetos personificados) que ejecutan
los hechos que se narran. Podemos clasificar a los personajes en
principales y secundarios. Y entre los personajes principales distinguimos
a aquel que lleva el peso de la acción, denominado protagonista, y al
personaje que se opone al protagonista, llamado antagonista.
- El espacio y el tiempo
en los que se inserta la narración constituyen el marco narrativo. Este marco siempre está presente, aunque a
veces el narrador opta por situar la acción en un lugar y en un tiempo
indeterminados.
EL NARRADOR.
TIPOS DE NARRADOR
En los textos narrativos, el autor
cuenta los hechos a través de la voz del narrador. El narrador es quien relata
los hechos y los presenta del modo que mejor se adapte a sus intenciones. Él
es, además, el que marca el tono de la narración, ordena los hechos,
caracteriza a los personajes y guía, en suma, el transcurso de la acción.
El
narrador puede adoptar distintos puntos de vista y contar la historia en
primera o en tercera persona. Ello nos permite reconocer
dos tipos de narraciones:
- Narración en primera persona. El narrador, llamado narrador interno, participa, como
protagonista o como testigo, en los acontecimientos que relata. Ejemplo:
Sé
que un día llegué a París, sé que estuve un tiempo viviendo de prestado,
haciendo lo que otros hacen y viendo lo que otros ven. Sé que salías de un café
de la rue du Cherche-Midi y que nos hablamos. Esa tarde todo anduvo mal, porque
mis costumbres argentinas me prohibían cruzar continuamente de una vereda a
otra para mirar las cosas más insignificantes en las vitrinas apenas iluminadas
de unas calles que ya no recuerdo.
Rayuela,
Julio Cortázar
Cuando
el narrador es a la vez el personaje protagonista, hablamos de relato autobiográfico. Las memorias y
el diario son ejemplos de relatos autobiográficos. Si el autor narra su propia
vida, se trata de una autobiografía real, y es ficticia cuando el autor
presenta al narrador como protagonista.
- Narración en tercera persona. El narrador, llamado narrador externo, no participa en los
hechos que relata. Es el más común; cuenta todo lo que les sucede a los
personajes, como en el ejemplo que aparece a continuación. Ejemplo:
El
tío Lucas era más feo que Picio. Lo había sido toda su vida, y ya tenía cerca
de cuarenta años. Sin embargo, pocos hombres tan simpáticos y agradables habrá
echado Dios al mundo. Prendado de su viveza, de su ingenio y de su gracia, el
difunto Obispo se lo pidió a sus padres, que eran pastores, no de almas, sino
de verdaderas ovejas. Muerto Su Ilustrísima, y dejado que hubo el mozo el Seminario
por el Cuartel, distinguiole entre todo su Ejército el General Caro, y lo hizo
su Ordenanza más íntimo, su verdadero criado de campaña. Cumplido, en fin, el
empeño militar, fuele tan fácil al tío Lucas rendir el corazón de la señá
Frasquita, como fácil le había sido captarse el aprecio del General y del
Prelado.
La
desheredada, Benito Pérez Galdós
En
algunos casos, el narrador en tercera persona conoce todo sobre sus personajes:
lo que hacen, lo que sienten, lo que piensan...; decimos entonces que es un narrador
omnisciente (omnisciente significa «que todo lo sabe»). Ejemplo:
Pero
Isidora, para quien aquel espectáculo, además de ser enteramente nuevo, tenía
particulares seducciones, vio algo más de lo que vemos todos. Era la
realización súbita de un presentimiento. Tanta grandeza no le era desconocida.
Había soñado, la había visto, como ven los místicos el cielo antes de morirse.
La
desheredada, Benito Pérez Galdós
En
otros casos, el narrador solamente cuenta lo que estos personajes hacen o
dicen, sin adentrarse en su interior.
LA ACCIÓN
El
conjunto de acontecimientos que se narran constituyen la acción o trama
narrativa. Esos acontecimientos se producen en un lugar y en un tiempo
generalmente determinados. El narrador puede contar esos hechos en un orden
cronológico, como ocurre generalmente en los cuentos. Pero también puede romper
ese orden anticipando sucesos que ocurrieron más tarde o dando un salto atrás
en el tiempo para remontarse a hechos lejanos.
El
narrador puede contar los hechos tal y como se han ido produciendo, de
principio a fin, o alterar el orden de los acontecimientos dando un salto
temporal hacia el pasado o hacia el futuro. Según
esto, podemos distinguir varias formas de ordenación temporal:
- El desarrollo lineal.
La narración va presentando los acontecimientos en orden cronológico,
desde los más antiguos a los más recientes. Los cuentos tradicionales, por
ejemplo, suelen presentar esta organización.
- La anticipación. Es
una ruptura del orden temporal que consiste en adelantar acontecimientos y
anunciar hechos que se producirán más tarde. En el siguiente fragmento, el
enunciado destacado constituye una anticipación:
En
mala hora siguió el rey los consejos de Hagen. Los aguerridos caballeros se
aprestaron a ejecutar su alevoso plan sin que nadie lo descubriera. La querella
de las dos mujeres iba a causar la muerte de más de un héroe.
Cantar de los nibelungos
- La retrospección. Es
otra ruptura del orden cronológico, consistente en retroceder en el tiempo
(dar un salto atrás) para contar hechos anteriores al momento en que se
sitúa la historia. Así ocurre en la novela policíaca, en la que es
frecuente comenzar con un crimen para, a continuación, reconstruir los
acontecimientos que lo precedieron. Veamos un ejemplo de retrospección:
Como
unas dos horas antes de la entrevista de que hemos hablado en el capítulo
anterior, despertábase Guillermo Sikes, que acababa de echar un sueño, y
preguntaba qué hora era.
LOS
PERSONAJES
Son los seres que llevan a cabo la acción. El lector
los conoce por la descripción que el narrador hace de ellos, por sus actitudes,
por lo que hacen y dicen. Generalmente son personas, reales o ficticias, pero a
veces también pueden ser animales u objetos personificados. Ejemplo:
En un lejano país existió hace
muchos años una Oveja negra. Fue fusilada. Un siglo después, el rebaño
arrepentido le levantó una estatua ecuestre que quedó muy bien en el parque. La oveja negra, Augusto Monterroso
- Según su
importancia en el desarrollo de la acción, los personajes pueden ser principales
o secundarios. Entre los primeros destacan el protagonista,
que es quien lleva el peso de la acción, y el antagonista, que se
opone a él.
- Según el
grado de profundidad psicológica con que se presentan, los personajes
pueden ser planos o redondos:
- Los personajes
planos no cambian a lo largo de la obra y responden a un esquema de
conducta previo. Los personajes de los cuentos tradicionales, por
ejemplo, suelen estar construidos como personajes planos que con
frecuencia encarnan una virtud, un defecto o una cualidad.
- Los personajes
redondos, en cambio, poseen características individuales y
evolucionan a lo largo del relato; son seres de complejidad psicológica
que se acaban pareciendo a los reales. Los personajes más importantes de
las novelas suelen ser de este tipo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario